El Celta es el cuarto equipo más goleado de la liga con 50 tantos en 33 partidos, de los que ocho fueron en las cinco contiendas con Giráldez
29 abr 2024 . Actualizado a las 21:57 h.La sangría de goles en contra vuelve a la palestra en el peor momento de la temporada. Los tres tantos encajados en Mendizorrotza significan que el Celta alcanzó la temeraria frontera de los 50 goles recibidos, algo que se ha repetido en otras ocho ocasiones desde la vuelta a Primera. En estos momentos, a falta de cinco jornadas, el vigués es el cuarto equipo más goleado con un promedio de 1,5 citas por contienda. Además, el mal endémico del balón parado volvió a aparecer en el peor momento, con dos goles rivales de un modo consecutivo, seis en la cuenta general de la temporada.
En los cinco partidos que Claudio Giráldez lleva al frente del equipo, el Celta encajó ocho goles y solo fue capaz de mantener la portería a cero en una ocasión, en el partido de Balaídos ante el Rayo Vallecano. Su media es de 1,6 en contra. Los 42 goles restantes corresponden a la era Benítez con un ratio de 1,5. Cortar la sangría de tantos en contra fue uno de los caballos de batalla del madrileño desde el primer día, pero salvo en época muy concretas, nunca consiguió erradicar ese mal. El equipo ha sido a lo largo de todo el curso demasiado vulnerable y los rivales, con muy poco, hicieron daño, aunque en su caso el Alavés disparó en ocho ocasiones entre palos.
De los 50 tantos que lleva en su pesada mochila el Celta, 34 llegaron en ataque combinativo del rival y siete en balón parado, un aspecto que siempre vuelve cuando parece estar en vías de solución. Giráldez destacó que habían estado bien en ese aspecto cuando el cuadro vigués encajó un tanto de córner ante el Las Palmas, pero una semana después, el Alavés volvió a hacer daño por esa vía con el tercer tanto, el de Benavidez, pero además, remató todos los córneres, tanto por arriba como con la pizarra buscando el tiro desde el piso. En el reparto de goles en contra, también llama la atención que el Celta ya lleva cinco de penalti. Es uno de los equipos más castigados en este aspecto.
En la actualidad, y a falta de cinco partido, el cuadro celeste es el cuarto más goleado de la liga por detrás del descendido Almería, el desahuciado Granada y el Villarreal, que contrarrestar su saco de goles en contra con su inmensa pegada en ataque. El Cádiz y el Osasuna aparecen a continuación del cuadro vigués.
El camino a seguir
El camino para el Celta, quizás pase más por acertar arriba que incidir en cortar la sangría, aunque no debe dejar de intentarlo. De entrada, le esperan tres rivales con el gol entre las venas como Villarreal, Atlético de Madrid y Athletic, tres citas en donde dejar la portería a cero se antoja algo muy complicado.
A domicilio, el Celta no consigue dejar su portería a cero desde el triunfo en El Sadar a principios del pasado mes de febrero. Desde entonces, en cinco salidas, siempre terminó con tantos en contra. En casa, el último precedente fue el estreno de Claudio Giráldez como local con el empate sin goles ante el Rayo.
Hasta la fecha, el peor Celta a nivel de goles en contra desde la vuelta en el 2102 fue el de la temporada 16/17 con una media por partido de 1,8 tantos en contra (69 en total), mientras que la mayor solidez fueron las 43 dianas e los cursos 14/15 y 21/22. El curso pasado los vigueses acabaron con 53 goles en contra, una cifra que parece difícil rebajar con cinco contiendas por delante para acabar el curso.